Investigadores de la Universidad de Utah
han preparado un estudio donde se demuestra como de una investigación
pasada (detección y seguimiento de movimiento con redes WiFi) se
podría monitorear los patrones de respiración de una persona. Con este
método se puede diagnosticar efectivamente problemas del trastorno del
sueño.
Como podemos ver en la imagen, para monitorear la respiración se necesita 20 transmisores inalámbricos a 2,4 GHz y un monitor
de dióxido de carbono. Este esquema puede puede medir respiraciones
dentro de un margen de 0,4 a 0,2 respiraciones por minuto, por lo que
los errores son mínimos y se alcanza un nivel de precisión bastante
elevado.
Aunque esta tecnología que usa redes WiFi
para monitorear la respiración de una persona representaría una
disminución del costo en este tipo de tratamientos, todavía se necesitan
5 a 6 años para terminar de desarrollar esta tecnología.
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